Aluvion y Solidaridad...

El 93' me toco vivir de cerca, bien de cerca el aluvión de la quebrada de Macul. Yo vivía cerca del Zanjón de la Aguada por Avenida la Florida.
Me acuerdo perfecto aquel día, íbamos al colegio como siempre, con mi compañero, llovía de una forma espectacular, en esos tiempos Vicuña Mackena con Vicente Valdés, donde quedaba mi colegio, era un río o mas bien una laguna, el agua estaba de lado a lado, con mis compañeros, los pocos valientes que fuimos ese día no sabíamos como cruzar esa calle, incluso algunos se devolvieron a casa. Pasaban autos y formaban olas que hacia mas difícil cruzar esa calle, mas bien entrar a esa calle. Existe en esa esquina un condominio de departamentos el cual tiene perimetrado con rejas, por lo que nos encaramamos en la reja para poder entrar al colegio. Cuando pasaba los autos era nuestro horror, el oleaje que producían llegaban casi a nuestros pies, el cual nos podía mojar mas de lo que estábamos, recuedo que paso un auto y varios, incluido, nos quedamos colgados de la reja, para no mojarnos.
Me recuerdo que llovía con escandalo, pero no hacia tanto frió, lo cual produjo aquella tarde fatídica. No fuimos muchos al colegio ese día, para que decir los Profesores, también eran pocos, se notaba en el ambiente que ese día iba ser especial.
Estábamos en recreo, obviamente nos quedamos en la sala viendo como ese río subía mas desde cuando llegamos, cuando por ahí un compañero que usaba su walkman, nos informa de que hubo un aluvión en la Quebrada de Macul, y en varias partes el Canal san Carlos y el Zanjón de la Aguada se había subido llegando a varias casas del sector. Lo primero que pensé fue en mi departamento, en mi hogar, que quedaba como a 5 cuadras del zanjón, pensé en mi Madre, que estaba sola junto con mi hermana.
Cuando entramos a Clase, se nos informa que quedaban suspendidas y que nos fuéramos a la Casa, así que partimos rápidamente con mi compañero que vivía cerca mio. Cuando llegamos al barrio, gracias a Dios no había ocurrido casi nada, eso si mucho barro en la calle, cuando llegue mi mamá me abrazo, estaba feliz por que había llegado y no tan mojado. Ella tenia prendida la TV, y mostraban el desastre que ocurría cerca de nosotros, también veía como pasaban los helicópteros a ayudar a la gente.
Con un amigo decidimos ir a copuchar al zanjón, ya era tarde y la lluvia había cesado, al llegar a dos cuadras, vimos como el barro llego a las puertas de los departamentos que estaban en el primer piso, la calle estaba llena de barro, por lo cual nos fue bien difícil llegar. Era impresionante, veíamos como el zanjón amenazaba llevarse el puente que lo cruza por avenida la florida, el zanjon llevaba escombros, de todo, televisores, techumbres, radios, hasta un refrigerador el cual estaba golpeando el puente. Carabineros tenia cerrado el puente y desviaba los autos por otros lados, era inminente que le pasara algo al puente, así que cuando nos vieron copuchando, nos echaron de ahí, recuerdo perfectamente las palabras del cabo "que están hueviando aquí, vayanse a casa" así que le hicimos caso. Pero nunca había visto algo así.
Esa misma semana hubo una especie de teletón, animada por Don Francisco, obvio. Llamaba a donar ropa, alimentos, llamaba a los colegios, universidades a organizarse y ayudar, lo cual mi colegio hizo. Llamo a voluntarios para recolectar ropa, y juntarla en el gimnasio, así que fui uno de cuantos que ayudamos, me toco separar ropa y ordenarla por tipo. Era inimaginable toda la ropa que llego, recuerdo que había varios cerros, si cerros de ropa de mujer, de hombre, de niños, etc, llegaba de todo, calcetines, calzoncillos, cinturones, zapatillas, hasta chalas, es increíble, pero es verdad que llega ropa que no se ocupara. Había demasiados olores que todavía recuerdo, desagradables especialmente. Daba Pena ver que tanta ropa se iba a la basura, por que no servía. Se junto demasiada ropa, eran cerros, y no faltaba el tontito que jugaba con la ropa, se tiraban encima, hacían competencia de quien se ponía mas prendas, en fin, el jueguito terminaba cuando llegaba un inspector, o profesor a cargo. Igual estábamos felices por que habíamos cumplido una meta, y que con la ayuda de muchos esa ropa iba a estar en buenas manos. Juntamos muchas Bolsas con ropa y la llevamos a la Municipalidad, el colegio se consiguió Camionetas, y los furgones de transporte escolar, fuimos varios compañeros a entregar esa ropa, fuimos a la quebrada y albergues a entregar ropa, y me toco dársela a una familia que estaba con su bebé, fue impresionante con la alegría que me recibió esa familia aquella bolsa, especialmente por que habían perdido todo, su casa quedo a 200 mts mas abajo y se había salvado por que una vecina los ayudo a arrancar, se habían quedado con lo puesto. Yo le decía que no era la mejor ropa, pero ellos no les importaba, por lo menos tenia con que arropar a su bebé.
Al recordar estos episodios y revivirlos ahora, quise hacer lo mismo y ayudar en algo, pero con una familia y hija, es difícil, eso si juntamos ropa y muchos pañales en nuestro edificio, la idea mía era partir al sur, pero ni pensarlo.
Nuevamente reviví aquella escena de 1993, pero desde lejos, y no es lo mismo, se que esos pañales que di, y la poca ropa de mi bebe iran a buenas manos... eso espero.
Y no va ser lo ultimo que hagamos, siempre va a ver un tiempo de solidaridad.